El conjunto de Luis Enrique apabulló a Inter en la final de la Champions League y se adjudicó su primera orejona de la historia en el Allianz Arena.
El fútbol que le gusta a la gente. Apabullante nivel del equipo francés, que con jugadores con una movilidad exorbitante lo mareó al nerazzurri que no supo nunca donde marcar y un puñado de minutos le bastaron para terminar la final con los goles de Hakimi -ley del ex- a los doce minutos y Doué con la bendición del desvío en Di Marco a los veinte. Luego no se quedó el PSG, y siguió haciendo correr la pelota sin que los de Inzaghi sepan donde ni a quien presionar para recuperar la pelota. Incluso a los cuarenta y siete, en el último córner, Kvaravatskhelia de cabeza tuvo el tercero, pero el roce en el travesaño fue del lado de arriba.
En el complemento, obligado por la necesidad, Inter salió a tomar más riesgos de lo normal y en seis minutos de juego el PSG lo perdonó tres veces con dos tiros del georgiano y otro de Dembelé. Dos minutos más tarde, Salieron Pavard y Di Marco, e ingresaron Bisseck y Salewski. Este último al minuto tuvo una de peligro que debió darle el pase a Lautaro, pero nunca lo hizo, la perdió, cometió foul al borde del área y se ganó la primera amarilla de la noche, y Bisseck duró diez minutos, ya que en una excursión en ataque se lesionó. En su lugar ingresó Darmián, y también ingresó en la misma ventana Carlos Augusto por Mkhitaryan. Hechos los cambios, la pelota se pone en juego y de la mano de Doué nuevamente partido liquidado, 3-0. Listo el pollo, y quedaban veinticinco minutos más lo que quiera agregar el juez rumano para disfrutar del fútbol champagne -nunca mejor dicho- de Paris Saint Germain.
A los setenta y dos minutos, como parte del disfrute del fútbol champagne, el georgiano Kvaratskhelia corrió veinte metros solo, para irse mano a mano con el suizo Sommer, y de zurda al primer palo puso el 4-0. ¿Listo? no, a los ochenta y cuatro minutos entre Barcolá , Vitinha y el definidor Mayulu se pusieron a toquetear en el semicírculo buscando los huecos, hasta que los encontraron y el volante recientemente ingresado pisando el area chica, si la chica, definió cruzado para el 5-0. Se cumplieron los 90 y se escuchó el pitazo final, PARIS SAINT GERMAIN GANÓ SU PRIMERA CHAMPIONS LEAGUE !!!!
Ahora son cinco las finales que acogió el Allianz Arena, y en todas se consagró un equipo que nunca había ganado la Champions. Y colorín colorado, la racha del primer campeón ha perdurado.
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